Siendo
el último día de la semana del mes previo a la semana mayor, del año pasado. Estaba un
residente de medicina interna en su primer año, en sus primeros servicios. 

Ese día. El joven residente se encontraba fuera del
hospital, porque era feriado. Él se encontraba en la casa descansando, haciendo
los quehaceres de la casa, además del descanso correspondiente.

Él
sentando en ese momento, sobre una silla de plástico, recostado, viendo y
revisando su teléfono. Revisando Facebook, buscando nuevos memes que sean
graciosos para luego mandárselos a sus contactos. Es característico de él.
Aunque hay algunos que no entienden los memes, aunque el chiste es muy obvio.

Luego
de revisar y mandar memes a ciertos contactos. Ve que entra un mensaje de la
jefa de la emergencia. Donde dice: ¿cómo es posible, que dejes muchas recetas
pendientes de hacer haciendo que el turno se recargue más? Al ver el mensaje.
El joven residente rápidamente se acomoda en la silla de plástico, responde que
lo arreglara lo más pronto posible. Una vez enviado el mensaje, encendió su
computadora y lo arregla. Para evitar problemas posteriores, y no recargar el
turno.

La
jefa de emergencia, de ese entonces, estando en su tercer año de residencia, de
la especialidad más bonita del mundo, y que es la madre de todas las ciencias.
Era compañera, mejor dicho, amiga, cómplice, hermana, de otra residente de
tercer año. Ambas, siempre ayudándose en todo momento. Siempre unidas, siempre
juntas, desde el primer año. Siempre compartiendo gustos y disgustos.
Compartiendo comida, hambre, sueño, desgracias, peleas, ingresos y evoluciones.
Siempre cuidándose las espaldas. Para que las personas que estando de jefas de
ese entonces no las molestasen, y así pasar el día lo más tranquilo que se
pueda.

¡Pero
No!

Siempre
tiene que haber algo, que se lo reprochen a uno constantemente. 

¿El Motivo?
Buscar destruir esa amistad que se ha creado desde hace varios meses. Y otros
motivos, que al momento desconocemos.

Luego,
todo transcurre con normalidad nuevamente.

Pero
no todo es color de rosa. Revisando el rol enviando, observa que se le fue asignado
el servicio de encamamiento. 

Al
ver dicho rol. Ella tan apaciblemente menciona: ¡Me toca servicio!

Lo
toma con tal calma, con tal armonía, con esa paz y tranquilad que la caracteriza,
diciéndose a sí misma. ¡Les demostraré que yo puedo hacer lo que pongan, y lo
que me proponga!

Llegado
el mes mencionado, como cualquier residente de servicio, realiza todas las
actividades asignadas. Pasar visita, realizar evoluciones, ordenes medicas, trámites
administrativos, tramites médicos, entre otros. Y así… el mes transcurre
rápidamente. Hasta finalizar el mismo, sin ningún problema. Siempre con la
ayuda de su hermana residente.

¿Quién
es la hermana residente que ha estado con ella en todo momento? 

La respuesta:
ella identifica quien es, sin necesidad de mencionar nombres o apellidos. Y se
distingue la amistad rápidamente, al verlas caminar por los pasillos del
hospital. 

¿Pero
quién era la jefa de emergencia en ese entonces, del que se está hablando?

…Ella
como cualquier residente, es especial.

De
estatura promedio. de complexión delgada. El pelo largo, negro y crespo. Que
siempre anda con cola, De tez morena, liza, bien cuidado, se nota a simple
vista. Tiene voz suave, agradable, amena.

Durante
los turnos, por ser una persona delgada, siempre sufre de frio. Siempre carga
una chumpa delgada, de color gris, con franjas verticales de color rosado, que
la caracteriza, el cual hace buena combinación. Y sobre ella su bata blanca.
Cuando habla, dice las cosas tan armoniosas, y tan gentiles, haciendo que todo
el personal presente en el servicio donde ella se encuentra. Realizan las cosas
con tal paz, que todo se hace rápido y eficiente.

Cuando
escribe, su letra es bonita, redonda, de buena caligrafía, haciéndola especial.
La letra es tan bonita, que todos quisieran tener la misma letra.

La
joven residente ha tenido muchas aventuras, tanto bonitas como desagradables.
Conoció al amor de su vida durante su estancia en el hospital y surgió el amor,
y luego contraerá nupcias.

Ya
eran los últimos meses del año, estaba feliz, contenta, emocionada,
porque dentro de su interior, se decía: quedan pocos días, pocas semanas para
terminar este calvario, este tormento.

¡Qué
alegría! ¡Qué emoción! 

Ya
seremos jefa de grupo, y nadie molestaran a las hermanas residentes.

¡Pero
No! ¡No, No y No! No fue así.

El
destino, ¡No las escucho!

A
finales de mes reciben el rol del mes siguiente, y para
sorpresa de todos, y más de ella. Le toca rotar por emergencia, y de compañera
otra residente, que ha sufrido igual que ella, ha sufrido tanto que
lastimosamente tuvo un trágico final.

Ese
mes, fue el peor de todos. 

Estando solo 2 persona en la emergencia, realizando
ingresos, pasando visita, viendo pacientes en la clínica, turnando sola,
realizando ingresos sola, sin ayuda de nadie. Y su compañera, amiga, hermana,
también estaba ocupada en otro servicio, haciendo que las 2 estén atadas de
manos, y no poderse ayudar. Era triste, caótico, deprimente. Pero al recordar
todo eso… ahora… es un recuerdo y nada nada más. 

Inicia
un nuevo año. Un año de cambios, un año de oportunidades. Un año de nuevas
metas. Nuevos sueños. Todo nuevo…

Ahora,
todo lo que se había vivido, queda únicamente como algo que nunca volverá a
pasar. Aquellas personas que las hicieron sufrir, llorar, hasta maldecir.
Quedan en el pasado. Y se cierra un capítulo más de la vida, de la jefa de
grupo, que orgullosamente tocara ser de ahora en adelante.

Iniciando
el año, se les fue asignado un nuevo rol. El cual, a disposición del jefe de
residentes actual, se decide optar por asignar un rol, que este durara 3 meses,
con el objetivo, de llevar un plan piloto.

El
joven residente, mencionado a inicios de la narración, ahora asciende al año inmediato superior. Y por fortuna de él, le tocara turnar con la jefa de
grupo, por estos meses.

El
residente. Ahora toca rotar y turnar por el servicio
de intensivo. Quien por fortuna de él. Tiene una gran mentora, alguien que le
enseñara que todo se aprende, con paciencia, lectura, pasión, persistencia,
amabilidad, trabajo en equipo, entre otras cualidades que la caracteriza,
siendo unas de las personas especiales de este año.

Ella
con la paciencia que la caracteriza, y con la nobleza de su corazón, haciendo
que cualquier persona quiera turnar con ella, porque siempre ha gustado la
docencia, la paciencia para explicar, entre otras cualidades.

El
residente que estaba turnando con ella, era despistado, distraído, confiado, y
con un vocabulario que no entraremos en detalles, solo cabe mencionar que tiene
un vocabulario expresivo. ¡Muy expresivo!

Él
al principio tomaba decisiones sin el consentimiento de ella. Iba a comer, sin
avisarle. Salía a traer cosas al carro, sin notificarle. Entre otras barbaridades.
En fin… ella al notar eso, decide colocar un alto.

Pero
lo hace de una forma tan amena, tan tranquila, tan… ella. Al oír la llamada de
atención, el residente, respeta lo que se le indica y ahora en adelante, todo
lo que se haga, tiene que ser con el visto bueno de ella. Y así… todo marchó
bien durante esos meses.

Ella
tiene la capacidad de enseñar, haciendo que todo lo complicado, aunque se haya
leído varias veces, simplemente ella lo explica de una forma tan sencilla, que
todo lo complicado, se vuelva fácil y entendible.

Ella,
nunca abandonó al residente, siempre está atento a todo lo que pase, atento a
que las tablas estén bien llenas. Que los signos estén al día, y que nada se
pase por alto. Siempre preguntándole al residente ¿Qué opinas tú acerca del
caso? ¿Cuál es tu análisis? Entre otros cuestionamientos que surgen durante el
turno. Haciendo que el residente lea acerca de las patologías presentes en ese
momento.

Ella…
siempre toma la iniciativa de realizar los OTOA’s, sin que el residente le pida favor que le ayude. Ella… inicia a evolucionar. 

Busca una silla,
se sienta, con papeleta y tabla en mano, busca su lapicero, busca la hoja la
evolución. Toma el lapicero con la mano derecha, se arremanga la chumpa
característica, hasta llegar al codo. Revisa… lee… analiza los diagnósticos
nuevos, y el comentario previo. Toma una nueva hoja de evolución, se acomoda
sobre la silla, se acomoda nuevamente el cabello, toma su celular, y la coloca
sobre la mesa, viendo constantemente, porque en cualquier momento, el amor de
su vida, la llamará o le escribirá, para preguntarle ¿Qué Quiere de comer? ¿Qué
se le antoja degustar de almuerzo o cena? Y ella, cuando observa el mensaje o
la llamada, su expresión cambia y se observa lo feliz que se encuentra, expresa
una sonrisa de oreja a oreja, sus ojos brillan, su voz cambia. Y ella… emana
felicidad y alegría.

Al
terminar la llamada, recoge el lapicero con la mano derecha, toma la hoja de
evolución, e inicia a colocar los piecitos y el encabezado correspondiente.
Inicia a escribir, mientras lo hace, analiza detenidamente cada diagnóstico,
cambia el orden del mismo, porque hay que actualizar diagnósticos. Una vez
hecho eso, inicia con el examen físico. Y cuando inicia el comentario, es cuando
inicia la magia del intensivo… comienza con los parámetros ya clásicos de las
hojas de evolución, iniciando con lo hemodinámico. Describiendo, analizando,
sacando conclusiones del por qué o para que tiene ciertas soluciones,
medicamentos, parámetros ventilatorios, antibióticos, sedación, analgesia,
entre otras cosas. 
E
indicando al residente, que todo tiene que ir justificado, todo que ir por
escrito, porque lo escrito es lo que cuenta. El residente, atento a lo que ella
dice, toma eso y lo guarda en su disco duro.

Al
terminar la evolución, revisa nuevamente las tablas, observando que todo esté
en orden. Y al observar que todo se encuentra en orden, y que el residente no
tenga dudas al momento, decide ir a comer, porque su amado ya llegó con la
comida solicitada y para degustarla junto a él. Haciendo que ambos, estén
conectados uno con el otro.

Y
así pasa el turno… todos los turnos, los tres meses. 
Y en cada turno, siempre
hay cosas que aprender, cosas nuevas que ver, cosas que medir. Siempre dando
docencia, siempre atenta, amable, tranquila, con voz dulce y melodiosa,
paciente. Y así… transcurrió todo el año. Hasta hoy.

En
uno de tantos turnos. Que no había mucho que hacer, de hecho, todo estaba
tranquilo. Decide sacar un catálogo, donde puede observarse los preparativos de
la boda del año. ¡Qué Nervios! ¡Qué emoción! ¡Qué alegría! Todo lo que se tiene
que hacer para poder lograr ese sueño, que toda mujer llegara a realizar, el
día de su boda. Es tanto la emoción, que lleva aproximadamente 1 año en
realizar todos los preparativos, de lugar, comida, vestidos, damas de honor,
comida, flores, iglesia, invitados, música, y demás cosas. Y lo más estresante,
que todo salga bien.

También
no se puede dejar atrás las tradiciones y costumbres, que en toda boda se
realiza: algo nuevo, algo prestado y algo azul. El pastel de bodas. Marcha
nupcial. Ramo de la novia. El velo. Vestido de novia y la liga. No mostrar el
vestido antes de la ceremonia. Lanzar el ramo. Lo votos de matrimonio. El
anillo. Entre otras costumbres y tradiciones que no se olvidan.

En
fin… hay mucho de qué hablar y comentar. Pero al final de todo esto. Ella se
convirtió en la internista que tanto deseaba ser. Y próximamente…
gastroenteróloga. Sin olvidar a su hermana que siempre estuvo a la par de ella,
en todo momento. Como hermana que es. De hecho… es más que eso.

Ahora…
se nos casa. Iniciará una nueva vida junto al hombre que siempre ella soñó. Y
nunca pensó que cuando estaba de externa, y él de residente, se iban a enamorar
tan profundamente, y decidir pasar el resto de sus vidas juntos, hasta que la
muerte los separe. Estando siempre en la salud y en la enfermedad, pobreza o
riqueza, y en demás situaciones, demostrando que el amor, todo lo puede vencer,
todo lo puede superar, todo… absolutamente todo. Y no hay nada más fuerte que
el amor, que se profesan uno al otro.

Él…
el hombre que siempre deseo tener a su lado. El macho alfa, lomo plateado,
pecho peludo. Voz de espartano.

Él
siendo líder, carismático, quien la inspira, le crea admiración, siendo un
genio, optimista, protector, pro activo. Entre otras características, que solo
ella conoce.

Él…
es el hombre más afortunado de este mundo. Porque se ganó el corazón de esta
bella dama, que es única. Por todas las características ya mencionadas, y otras
que solo él conoce.

Ella…
preparada para el día más especial de su vida. Teniendo todo preparado, el
vestido, el peinado, su maquillaje, el ramo de flores, el velo, la liga, los
zapatos, sus votos, lo nuevo, lo viejo, lo prestado, etc. Ella imaginándose
días previos, caminando hacia el altar, con el vestido que tanto costo
encontrarlo, el ramo sostenido en sus manos, el rostro cubierto con el velo,
llena de aire, casi solemne, caminando feliz y nerviosa con un gesto lleno de
parsimonia.  Para que Dios, sea testigo
de la unión de estas dos almas que han luchado por estar aquí. Y entregar sus
vidas, para que de ellas hagan una sola, hasta el final de sus días. Y decirse
el uno al otro… eres y serás el amor de mi vida.

ALXA…
este residente. Agradece todo lo que le enseñaste. La paciencia, el tiempo que
tomaste para explicar las cosas, para ver que todo marchaba bien, que todo
salía bien. Agradezco el tiempo que te tomabas para estar a mi lado
explicándome ventilación mecánica, sobre gases arteriales, a la par del monitor
de Swan Gangz, explicándome cómo funciona, que parámetros debo modificar, y lo
más importante, qué hacer con esos datos.

Gracia
por el tiempo, que nos dedicaste a la docencia, al pase de visita, para
explicarnos una y otra vez las cosas, aunque muchas veces no entendíamos que sucedía.
Pero con tu paciencia, y tus conocimientos, aprendimos. Y son cosas que se
llevan en el alma.

Eres
y serás única. Eres y serás especial. Que Dios bendiga tu hogar, tu familia,
tus proyectos, tus planes a futuro. Que todo lo que se haga, sea siempre bajo
la dirección de Dios. Y que Dios te guié, te proteja y sobre todas cosas, que
siempre sigas tal y como eres, sin perder tu esencia.

Tu
prometido… supo ganarse tu corazón, tu alma, tu esencia. Supo ganarse a la
mujer que el día de hoy está dirigiendo sus pasos hacia el altar, y Él, al ver
esa hermosa persona, con el vestido tan hermoso, haciendo que ella sea la mujer
perfecta para Él, la esposa, la ayuda idónea, la mujer que siempre soñó …Y Al
llegar al altar, Ambos se miran, diciéndose el uno al otro:

“Eres mi mejor amigo, mi mayor confidente, mi amante
incondicional y mi máximo deseo. ¿Te das cuenta? Te has convertido en mi vida”

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